Cuando estás adiestrando o haciendo ejercicio, es necesario darte un espacio para reposar y relajarte ya antes de seguir con el otro ejercicio. De otro modo, quemarías tus músculos demasiado veloz. Lo mismo sucede cuando estableces contacto físico con las mujeres. Debes presionar unos instantes y después dejarlas respirar. Si prosigues la escalada sin darle ni un minuto de respiro, corres el riesgo de llegar hasta sus límites demasiado veloz. Predecesores de los conmutes femeninos bien pudiesen ser los diafragmas que mienta el Corpus Hippocraticum y que, lógicamente, aparecieron en primer lugar en Egipto. Una cáscara de nuez acondicionada, media granada o medio limón sin semillas insertados en el cuello del útero parecían suficientes para impedir la entrada del esperma. El más efectivo semeja que era el fabricado con medio limón, puesto que agregaba el poder espermicida del limón a la barrera del diafragma. Y lo sabemos no únicamente por la literatura vieja, sino por el propio Casanova quien, según afirman, solía ofrecer a sus amantes medios limones con el pezón hacia adentro para no molestar el amor.
Tienes todo el derecho de sentirte furioso(a) y de descargar esa furia, mas no dejes que las peleas se alarguen más de un par de semanas, pues tu objetivo es corregir las cosas. La ira continua y desenfrenada, junto con las acusaciones llenas de odio, interfieren en el proceso. Hay posturas eróticas que hacen que el ritmo cardíaco se dispare de inmediato. Ésta es una de ellas. El hombre y la mujer, pegados, el uno junto al otro, de costado, frotándose… ¿De qué forma eludir que las pulsaciones se disparen? Parece bastante difícil. Si la idea de desempeñar un papel diferente en la vida te resulta interesante, entonces quizás tú y tu pareja podáis jugar a fingir que sois otras personas diferentes cuando tenéis relaciones íntimas. Para ciertas personas, asumir un papel diferente durante el sexo puede ser una experiencia enormemente erótica, pero, como ya se ha comentado previamente, no siempre debemos hacer nuestras fantasías. Debido a que el juego de roles es una fantasía, deberás primero charlar de ello con tu pareja.
El enamoramiento dura de media entre uno y 3 años. Desde este tercer año la secreción de dopamina al cerebro disminuye, y por consiguiente también reduce el carácter obsesivo de la relación. Al lado de la dopamina se reduce también la producción de norepinefrina, y a causa de ello desaparece la sensación de euforia del amor. Hola mi nombre es Carolina y soy una lolita que, a primera vista, parezco un poco tímida, pero en la intimidad, saco mi lado salvaje, la felina que llevo dentro te gustará. Te voy a besar tal y como si fuera tu novia y vamos a hacer el amor hasta desgastarnos, mas te confieso que me gustan los preliminares y así, de esa forma, vamos a ir calentando nuestros motores. Ven a conocerme, visítame y deléitate con mis pechos naturales, además tengo considerablemente más razonamientos.
Y es que ya queda como anticuado decir aquello de tengo un amigo con derecho a roce
Recordad que la intuición es tu mejor Ala, porque de la misma manera que tu no puedes mentir a una mujer, sabe que vas a ligar, su intuición se lo afirma por como vas vestido y por que estas invirtiendo en ella sin conocerla de nada, tu Con frecuencia las parejas disfuncionales adoptan esta actitud como una forma de intercambio de protestas o concurso de malos. Y muy frecuentemente frente al tú jamás… el otro busca ejemplos puntuales en que sí ha hecho tal cosa. Por ejemplo. Al respecto, la ciencia es muy clara: el enamoramiento ciego, desquiciado y apasionado de los primeros días desaparece siempre y en toda circunstancia. Es completamente imposible sostener toda la vida tal estado de embriaguez sentimental. En términos biológicos es un derroche de energía superfluo, y el términos evolucionistas no tiene ningún sentido mantener la fase inicial del enamoramiento. En el Absoluto existe, no la evolución, no la Involución, solamente la VOLUCIÓN y en la VOLUCIÓN se halla toda posible Evolución e Involución. A esta VOLUCIÓN se le conoce como movimiento del sin movimiento. Por el hecho de que si bien continúa sin embargo existe la personalidad y el Ser, la evolución y la Involución, tanto en el Ser como en la Personalidad. Todo es dinámico. Todo es real Todo está vivo sea como existencia esto es como vida.
Edificando cimientos
Pues claro que no; si mi pareja me ama, por nada del planeta me sería infiel. No veo razón a fin de que me engañe. Yo tampoco la engañaría, soy incapaz de traicionar a la mujer que el blog me dio. Creo que el auténtico amor no traiciona; es tan sagrado que no ocasiona ningún daño. Cuando alguien le resulta infiel a su pareja, quiere decir que no la ama; quizás la quiere, mas no siente amor por ella. Sé de casos en los que se engaña al cónyuge; pero esto sucede en matrimonios donde no existe auténtico amor. Si amas de verdad a tu pareja no hay nada en el mundo que te haga serle infiel, ni herir sus emociones. La traición causa una herida demasiado profunda; y aunque sane, deja una gran cicatriz. ? Laura se puso de pie y sujetó la cabeza del consolador tirando de ella cara el borde de la mesa. Se agachó y pudo poner la cabeza en la entrada de su coño. Todo el planeta en la habitación miraba fijamente mientras que ella se bajaba sobre el gigantesco juguete de goma. Cuando su culo tocó la mesa, un audible jadeo de su boca llenó la habitación. Sus dos manos agarraron el borde de la mesa y trató de no moverse.
La versista Anna Akmatova o la británica Beatrice Hastings serían ciertas de ellas
Hola chicos. Soy Dana, una mujer latina que desprende fuego por su cuerpo. Deja que mi piel acaricie la tuya y vivamos juntos un sinfín de sensaciones. Deja que mi aliento acaricie tu oído y que mis manos, al acariciarte, te obsequien el placer más intenso. Hay opiniones divididas respecto a si existe o no el orgasmo anal. Para algunos sexólogos no existe ya que el clítoris no es estimulado. Para otros sí puede darse, puesto que es una zona que está repleta de terminaciones nerviosas que dejan una sensación inigualablemente agradable. Va a ser cuestión de probar, ¿no?. Sólo ahora, después de haber dedicado un buen tiempo al masaje del pecho, llega el momento de jugar con el pezón, la parte más sensible de la mama. Abarca todo el tejido del seno con las manos y usa el pulgar empapado de aceite para acariciar suavemente la punta del pezón. Haz una pausa y respira. Que ella también lo haga, de forma profunda. Repite ese movimiento, tal y como si intentaras burlarte del pezón, como si la promesa de tocarlo no fuera a cumplirse totalmente, en múltiples ocasiones. Rózalo apenas.
Hombres y mujeres piensan de manera diferente
A todos nos agrada vestirnos cuando salimos y que nos vean en nuestro mejor instante. La mayor parte de nosotros consideramos el sexo como algo para lo que te quitas la ropa, o bien compramos ropa interior desarrollada para despertar. Descubre nuevos aspectos de tu sensualidad al decidir qué te pondrás antes e inclusive durante tu acto sexual; intente traer una nueva emoción y pluralidad a su vida sexual vistiéndose para enfocarse en su sensualidad, en vez de hacerlo de manera directa en el sexo. En vez de una enana tanga negra, las mujeres pueden intentar envolverse con alguna tela diáfana que las cubra por completo desde las caderas hacia abajo, mas al mismo tiempo es reveladora y hermosa al tacto. En lugar de calzoncillos sueltos, los hombres pueden probar un pareo sedoso que animará a su pareja a sentir y ver el contorno de su cuerpo de una forma diferente. El síntoma de la culpa puede atacarnos tanto en lo personal como en la situación de pareja. Es posible que nos sintamos mal por algo que hicimos y queremos haber hecho diferente, o por algo que completamente no hicimos. Es entonces cuando nos sentimos culpables con nosotros mismos por no dedicarnos el tiempo justo o bien por haber hecho algo que pudo lastimar a otra persona, si bien fuera involuntariamente. Es normal sentirnos de este modo algunas veces. El secreto está en dejar ir lo que pudo haber sido y abrazar lo que es o lo que va a ser. Siempre hay aprendizajes y las resoluciones nos hacen medrar.